La entrevista telefónica es uno de los recursos más comunes en los procesos de selección laboral ya que permite una entrevista sin necesidad de desplazamientos. Siempre es conveniente estar preparado para esta situación pues puede ser una parte decisiva a la hora de otorgar un puesto laboral.
Suele ser común que la entrevista telefónica constituya un primer filtro antes de la entrevista personal y presencial. La empresa, mediante este método, descarta de una manera más fácil a los perfiles que no se ajusten a lo que buscan.
Por norma general, estas entrevistas no suelen durar más de 5 o 10 minutos y sirven como una primera toma de contacto con la empresa. El entrevistador busca aclarar dudas sobre el curriculum o conocer más sobre el perfil profesional del entrevistado y lo que puede aportar.
De igual manera que en cualquier entrevista personal, es muy importante qué se dice y las formas. Se ha de ser claro y conciso, evitando los nervios, pues el tiempo suele ser más limitado que en una entrevista personal.
Por ello, es conveniente tener claro previamente lo que se quiere decir. Estas entrevistas son la ocasión perfecta de los candidatos para dar a conocer sus perfiles profesionales de una manera más cercana.
A continuación, te dejamos unos consejos para que vayas a la entrevista mucho más calmado y puedas dar el 100% de ti mismo.
Antes de la entrevista
Durante la entrevista
La principal ventaja de este formato de entrevista es que puedes aparentar no estar nervioso si la voz no te tiembla en exceso. Para las personas nerviosas esto puede hacer que la conversación sea más fluida.
Una de las mayores desventajas se la lleva la gente que tiene un gran lenguaje corporal en persona. Esto les puede restar intencionalidad en sus palabras por teléfono.
La voz y tu soltura vía telefónica son elementos muy importantes en este tipo de entrevistas pues forman el canal en que le llega la información al entrevistador.
Tener un tono afable y enérgico transmitirá sensación de motivación y seguridad. Alguien con un tono pesimista o desganado es probable que ya de entrada no cause una buena primera imagen.
Es normal sentir cierto nervios ante una situación de este tipo pero es importante mantenerlos bajo control para que no te tomen la voz. Si es necesario, y te sientes más seguro, grábate con tu móvil antes de la entrevista simulando una hipotética conversación similar.
La entrevista telefónica es uno de los recursos más comunes en los procesos de selección laboral ya que permite una entrevista sin necesidad de desplazamientos. Siempre es conveniente estar preparado para esta situación pues puede ser una parte decisiva a la hora de otorgar un puesto laboral.
Suele ser común que la entrevista telefónica constituya un primer filtro antes de la entrevista personal y presencial. La empresa, mediante este método, descarta de una manera más fácil a los perfiles que no se ajusten a lo que buscan.
Por norma general, estas entrevistas no suelen durar más de 5 o 10 minutos y sirven como una primera toma de contacto con la empresa. El entrevistador busca aclarar dudas sobre el curriculum o conocer más sobre el perfil profesional del entrevistado y lo que puede aportar.