En cuanto se produce el fallecimiento de una persona, su cuerpo empieza a pasar por diferentes alteraciones que se conocen como fenómenos cadavéricos. Conocer estos procesos es imprescindible a la hora de poder conservar y preparar al fallecido para que se haga en las mejores condiciones posibles. Son reacciones que deben tenerse en cuenta a la hora de aplicar las pertinentes técnicas de tanatopraxia.
Tenemos diferentes teorías para definir y clasificar estos fenómenos cadavéricos . Entre las más importantes se encuentran: la clasificación de Borri de 1926, la clasificación de Franchini de 1985 o la de Bouchut. Pero sin duda, la más completa es la clasificación de Vargas Alvarado que estudiamos en el curso de tanatopraxia.
Este autor divide a los fenómenos cadavéricos en tempranos y tardíos. A continuación se expone un esquema de cada uno de ellos:
Lara Hernanz Fernández
Diplomada Universitaria en Enfermería
Docente del área de enfermería y medicina estética de ESSAE